miércoles, 14 de mayo de 2008

¡Hala por siempre, Albertazo!

Una entrada poco usual para este blog, pero necesaria.
Esta semana nos abandonó para siempre una gran persona, un caballero, un Señor con "S" mayúscula. Se trata de don Alberto Martínez, mejor conocido entre quienes tuvimos la fortuna de conocerle y tenerle muchísimo cariño, como "Albertazo", abuelo y mentor de mi gran amigo Eugenio Martínez. Nacido en España y venido a Venezuela en busca de un porvenir digno, fanático del Real Madrid, pero por sobre todas las cosas, un ser humano en todo el amplio sentido de la palabra. Un Señor que se ganaba tu cariño con las primeras dos o tres palabras que te dirigía; te recibía en su casa como si fueras su nieto, o la mejor persona del mundo. Así te hacía sentir.
Particularmente, a parte de la dicha de conocerle, tuve la oportunidad de echar unas cuantas jodas en su Fairlane, apodado "Rigoberto", en el que Eugenio siempre nos echaba el aventón para samparnos unas birras al salir de clases.
Creo que cualquier palabra sería insuficiente para hablar de la calidad humana de Albertazo.
Él se fue, pero nos dejó -y para siempre- su calidez paterna, su amabilidad, sun don de gentes, su inagotable nobleza. Que Dios bendiga siempre la labor de este gran Señor y que lo tenga en la gloria, lugar que por derecho le pertenece.
¡Hala por siempre, Albertazo!